El pasado 10 de abril, el emblemático Circo Volador de la Ciudad de México se convirtió en el epicentro del power metal, acogiendo el esperado retorno de Gamma Ray a los escenarios tras una pausa significativa. La banda, conocida por su energía y poderosas melodías, no decepcionó a los fans, ofreciendo una noche repleta de clásicos y sorpresas.
Un Setlist para Recordar
Desde el inicio del concierto, Gamma Ray estableció un ambiente electrizante con «Land of the Free», una de sus canciones más épicas, que inmediatamente capturó la atención de todos los presentes. La energía continuó ascendiendo con temas como «Avalon» y «Heaven Can Wait», cada uno resaltando la habilidad técnica y la pasión de la banda.
El setlist de la noche fue una mezcla perfecta de himnos del metal que mantuvieron al público cantando y headbanging a través de cada número. Sin embargo, el verdadero clímax llegó al final, cuando tras las últimas notas de «Send me a Sign», y cuando todos pensaban que el espectáculo había concluido, la banda sorprendió a todos regresando al escenario para tocar «Heading for Tomorrow». Este icónico tema no solo fue la cereza del pastel, sino que reafirmó el status de Gamma Ray como leyendas vivientes del metal.
Mercancía y Experiencia en el Concierto
Además de la música, el evento ofreció una gama de mercancía oficial a precios accesibles, permitiendo a los fans llevarse un recuerdo tangible de una noche memorable. Las camisetas estaban disponibles por 500 pesos y las sudaderas por 800, ambos precios razonables por artículos de alta calidad y diseño atractivo.
En cuanto a las bebidas, el Circo Volador mantuvo precios justos, con cervezas caguama a 150 pesos y cervezas de 355 ml a 60 pesos, permitiendo que los asistentes disfrutaran del evento sin preocupaciones por costos exorbitantes.
El Impacto de Gamma Ray en el Power Metal
Este concierto no solo marcó el regreso de Gamma Ray a los escenarios, sino que también reafirmó su influencia en el género del power metal. La banda, con su característico sonido que combina velocidad, melodía y una potente narrativa lírica, ha dejado una marca indeleble en la escena musical. Su actuación en Ciudad de México fue una prueba más de su habilidad para conectar con el público y ofrecer espectáculos que trascienden el tiempo y las modas.
Conclusión
La noche del 10 de abril en el Circo Volador será recordada como una donde Gamma Ray no solo tocó música, sino que también celebró con sus fans el poder y la pasión del metal. Fue un recordatorio de que, incluso después de pausas y proyectos alternos, la banda sigue siendo una fuerza formidable en el mundo de la música.
Este concierto fue un testimonio vibrante de la resiliencia y la dedicación de Gamma Ray a su arte, y un ejemplo brillante de lo que hace al metal, especialmente al power metal, un género tan querido y respetado. A medida que Gamma Ray continúa su gira, es claro que aún tienen mucho que ofrecer, tanto a los fans de largo tiempo como a las nuevas generaciones de metaleros.
El setlist del concierto se puede encontrar dando clic aquí.
